Caridad al alba |
El pasado Domingo 13 de
septiembre celebramos para festejar la festividad de nuestra Sagrada Titular, y
como viene siendo tradicional por estas fechas, el Santo Rosario de la Aurora en honor a María Stma. de la Caridad.
Rubén Herrera recibe su placa |
Sobre
las siete y media de la mañana, en el interior de la iglesia de San Francisco,
ya se concentraban multitud de personas para admirar a la Sagrada Imagen de la
Virgen, que en esta ocasión, lucia totalmente distinta en comparación con otras
ediciones del Rosario, ya que estrenaba un suntuoso y elegante manto en
terciopelo adamascado en color malva, regalo de hermanos y devotos. Así mismo,
completaban sus vestiduras una magnífica saya plateada bordada en tisú obra de Don Francisco García Ciruelo, a la sazón, vestidor de la Virgen, a
la cual, enmarcó su divina faz con un elegante rostrillo de encajes en beige, y
adornando su pecherín con broches, cruz pectoral, y con la medalla de nuestra
ciudad. La presea que otrora realizara Díaz Roncero, coronaba, como es tradicional, las sienes de
la talla mariana.
En plaza San Francisco |
Antes
de comenzar el Rosario, y en la capilla de la Hermandad, se le hizo entrega de
la placa conmemorativa a Don Rubén
Herrera Cabello, el merecido ganador del concurso fotográfico de este año
en que su obra anunció este piadoso evento.
A
las ocho en punto, nuestra hermana Mari Conchi Acuña, comenzaba con el rezo del
Rosario, mientras las andas que portaban a la Virgen de la Caridad, llevada por
un selecto grupo de horquilleros, comenzaba su peregrinar por la nave central
de la iglesia franciscana.
Acompañando a la Caridad |
Hay
que decir, que cuando la Virgen de la Caridad cruzó el dintel de la puerta
principal para adentrarse en la plaza, se observó del acierto en la elección de
los colores de saya y manto, que engrandecieron, si ello fuera posible, la
belleza de nuestra “Madre”.
En Pso. Nuevo |
Y entre cánticos y rezos, y poco después de una hora, volvía la comitiva a la
Sede Canónica donde se celebró una Solemne Eucaristía de Acción de Gracias, oficiada por
el Director Espiritual de la Cofradía, Fray
Jesús González Alonso, en una iglesia totalmente llena.
Devoto besamanos |
Otra
de las novedades, y que fue muy bien
acogida por todos, fue que una vez concluida la Misa, la Virgen de la Caridad,
quedó expuesta en la capilla de la Hermandad en un piadoso y devoto besamanos, que sirvió, para acercar más a la
Sagrada Imagen con sus feligreses.
En
síntesis, podemos decir, que una de las tradiciones marianas más añejas que
tiene nuestra ciudad, y como es el
Rosario de la Aurora, está más viva que nunca, muestra del cariño y devoción
que se tiene a una de las representaciones de la Santísima Virgen más bellas de
Vélez-Málaga.